miércoles, 2 de septiembre de 2015

Aparador para una bici



Me encargaron un soporte con forma de cajón para colgar la bici en casa.


Me pareció divertido darle la forma del cuadro para aprovechar mejor el espacio.




En el hueco se pueden guardar la mochila o el casco...
Y en la repisa caben las llaves, la cartera, el bolso o simplemente un adorno.



El mayor atractivo para mi es la construcción a base de colas de milano realizadas sobre diferentes ángulos diseñados por ordenador para hacerles coincidir exactamente con los ángulos del cuadro de la bicicleta.

miércoles, 26 de agosto de 2015

lunes, 3 de agosto de 2015

12 clavijas para una bandurria antigua

Boj torneado, fresado, tallado, limado, taladrado y lijado.
Doce clavijas artesanales para una bandurria antigua.
Estoy por quedármelas, me encantan.

domingo, 21 de junio de 2015

Silla aragonesa de un barrote

 
Antes
Después

Esta silla llegó hecha unos zorros, la señora que la trajo preguntó algo avergonzada si se podía reparar y nos sugirió, que si no era posible salvarla, que le guardáramos las piezas porque esa silla le traía muchos recuerdos. Un artículo que encierra tanto cariño no puede ser abandonado y se rescató.





Silla aragonesa





















ANTES                               DESPUÉS

                                                                                               







Esta silla llegó a nuestro taller después de haber sido restaurada por otras manos. Tenía completamente comidas las tallas del respaldo y las patas por culpa de la lija, los ensambles estaban sueltos, el acabado era de poliuretano brillante que le hacía perder el tacto de la madera, el barrotito central del respaldo era una caricatura...la propietaria estaba triste por ver una silla que no le recordaba a la suya.

Nosotros desmontamos la cuerda del asiento y aprovechamos para lavarla, desmontamos todas las piezas de la silla, raspamos el poliuretano (que nos costó un montón), reproducimos el respaldo añadiendo un barrotito torneado a medida, volvimos a encolar todas las piezas, volvimos a tallar los motivos decorativos siguiendo los pequeños restos que aún quedaban y fijándonos en otras sillas procedentes de la misma zona, le dimos un acabado a la cera y por fin repusimos la cuerda limpia y tensada.
Resultado: una persona muy feliz.